En la actualidad las empresas han invertido gran parte de sus esfuerzos en socialización, capacitación y estrategias para promover una cultura ética en sus negocios, una nueva tendencia radica en que los valores corporativos pasaron de ser no solamente parte de la plataforma filosófica de uso interno dentro de las compañías sino parte esencial de la relación con sus públicos externos.
A continuación, algunos de los beneficios de cimentar negocios a partir de valores y principios éticos:
- Permite un liderazgo coherente del equipo humano, porque a partir del ejemplo de los líderes, cada individuo tiene un referente de actuación para tomar decisiones acertadas cuando nadie lo esté mirando.
- Una empresa que basa su modelo de negocio en principios y valores sólidos, atrae más inversionistas, que se sienten seguros de una operación transparente de largo plazo.
- Una empresa que basa su gestión en principios y valores éticos, encuentra en la responsabilidad social empresarial, una excelente oportunidad de agregar valor al crecimiento y desarrollo de la sociedad y comunidad donde opera.
- Mejora la productividad, puesto que los colaboradores experimentarán mayor realización, sabiendo que lo que están haciendo es lo correcto y sentirán orgullo por la organización que representan, lo que incentivará su esfuerzo, compromiso y dedicación.
- Fortalece la calidad, desarrollando procesos eficientes y coherentes con la intención de ser útiles a la cadena de valor.
La ética en el mundo de los negocios merece un lugar prioritario en la estrategia, pues no solo trae consigo la mejora del desempeño organizacional y la reputación e imagen; sino que impacta directamente en el fortalecimiento de la lealtad y el compromiso de los colaboradores, quienes son los principales embajadores de una organización.
